¡¡Dime que decisiones tomas y te diré quién eres!!
Si… los resultados son directamente proporcionales con lo que se realiza o decide, causa/efecto, así como cuando sembramos una semilla de mango esperamos al tiempo y con paciencia, un hermoso árbol de esa fruta, así mismo no podemos pretender que nuestras decisiones tomadas hoy, den un resultado diferente a las implicaciones que esta decisión por causa/efecto tenga.
La vida, es un jardín particular donde lo que sembremos hoy es lo que veremos y disfrutaremos, o no, mañana. El NO tomar una decisión en cualquier situación de nuestra vida, sea una decisión doméstica o crucial, ya es en sí misma una decisión.
El permitir que OTROS lo hagan por nosotros, por miedo, comodidad, costumbre, complacencia o búsqueda de aceptación, es también una decisión.
Vivir es decidir, y este libre albedrío significa asumir responsabilidad por nuestras elecciones, y esto no es otra cosa que concientizar como seres espirituales, que estamos en este plano para aprender de nuestras experiencias, ¿con que fin? para evolucionar, y el camino es despertando a la Consciencia y ¿cómo hacemos esto?, un buen comienzo es empezar a darnos cuenta de pensamientos que nos produzcan ansiedad, tristeza, rabia, dolor, sufrimiento de alguna situación del pasado, o peor aún, que no ha pasado, que nos lleva a escenarios increíbles y terribles.
Usted y sólo usted, sabrá cuando comience a reconocerlos. Cada ser espiritual tiene su tiempo.
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Todo esto nos lleva a trabajar en la congruencia de sentir, expresar y accionar, lo que decidimos en el momento presente. En el único e irrepetible ‘AHORA’. El pasado ni con la máquina del tiempo como suelo decir, podemos cambiarlo, y el futuro aún no ha llegado.
No esperemos a creer que seremos felices con pensamientos como: cuando tenga tal cosa…cuando logre esto… cuando pase esto o aquello. Si te detienes a pensar un momento lo único que tenemos es el AQUÍ Y EL AHORA.
Te invito a decidir ‘Ser Feliz Ahora’. Empieza a sonreír más, no importa que no tengas motivos. Te aseguro verás los resultados. Es una excelente decisión.
La experiencia de vivir en este plano siendo seres espirituales, nos exige un continuo crecimiento y expansión de la consciencia. No podemos pretender obtener resultados diferentes mañana a lo que sembramos hoy.
Es muy importante cada día ser ‘Nuestra mejor versión’ en un entender eterno de cual es ‘El propósito’ en este viaje infinito; que estamos aquí para creer y crear nuestra propia grandeza espiritual.
Como decía el gran Maestro Bert Hellinger, ‘es más barato sufrir que buscar soluciones’. ¿Qué significa la expresión ‘más barato’? Quiere decir que al buscar un culpable y verter sobre él toda nuestra rabia o frustración, nos permite seguir ‘anestesiados’ en nuestra existencia, de que todo lo malo que nos sucede viene de afuera, y no de las decisiones que tomamos.
Ya el tomar la decisión de darnos cuenta que es nuestra responsabilidad, es un comienzo para reencontrarnos y empezar a sentirnos en paz.
Cuando asumimos sin buscar culpables, cambia por completo nuestra percepción. Les aseguro que el cambio es extraordinario.
Retorcernos dando vueltas y más vueltas en nuestra mente, creando pensamientos pesimistas y a veces nefastos de un futuro que aún no ha llegado, y que probablemente jamás llegará, nos produce sentimientos de dolor, sufrimiento, rabia, rencor, envidia, tristeza, ira, depresión, que afectan nuestras células emocionales en detrimento de la salud, y entender que justo en el momento, cuando nos hacemos responsables asumiendo nuestras decisiones anteriores, y analizamos desde el corazón que aprendizaje nos trae cada experiencia, buena o no tanto, es cuando empezamos a evolucionar como seres espirituales y entonces y sólo entonces, seremos capaces de emprender el camino de la paz mental que tanto anhelamos.
Cuando algo del afuera nos haga sentir vulnerables, débiles, angustiados, pues tomemos la decisión de hacerlo ‘diferente’.
Siempre decidiendo desde el amor sutil y la compasión. Y lo más importante, sin juzgar ni juzgarnos. Así que la palabra clave para vivir en consonancia con El Propósito de la vida es CONGRUENCIA.
Espero les haya parecido interesante y hasta la próxima entrega. Gracias por estar ahí.
Ma.Xiomara Albertos S.